LOS ÁNGELES
Se dice que antes de nacer cada individuo sabe perfectamente de dónde
viene, cuál será el lugar de su nacimiento, quienes serán sus padres, si tendrá
hermanos, etc. Pero como ello no puede ser divulgado, precisamente antes de
nuestro nacimiento, un ángel apoya un dedo sobre nuestros labios y dice:
“Calla, no digas lo que sabes”. Por eso nacemos con una hendidura en el labio
superior, sin recordar nada del sitio de donde venimos.
ÁNGEL CUSTODIO O DE LA GUARDA
Encontrar referencias concretas de los Ángeles custodios o de la Guarda es
muy difícil pero se sabe que estos seres espirituales y divinos son los
encargados de la protección de hombres y mujeres. También existe una tradición
cristiana acerca de estos Ángeles la cual dice que son seres que protegen al
hombre de la maldad y que dirigen sus pasos hacia el camino de la rectitud.
En la era medieval ya los cristianos tenían la idea de que cada individuo
nacía con un Ángel de la Guarda al cual se le asignaba permanecer a su lado,
éste constituye la voz de la conciencia.
Sabemos que los niños cuentan con un Ángel de la Guarda y que éste
permanece en contacto constante con Dios. Por tanto, se reafirma la idea de que
los seres más desprotegidos, principalmente los niños, y todos aquellos que
sufren por las acciones de terceros y por último que sufren por las acciones de
terceros y por ultimo los que por ingenuidad o ausencia de malicia son
desplazados y marginados por la sociedad, son quienes tienen la presencia de un
Ángel protector.
LA PROTECCIÓN DEL ÁNGEL DE LA GUARDA
Suele ser individual, actúa sobre la persona que tiene a su cuidado aunque
hay ocasiones en las que los Ángeles ejercen esa protección sobre una familia
completa o incluso a una comunidad.
No importa si podemos percibir o no la acción de un Ángel: lo importante es
gozar de la paz de espíritu ya que ésta es necesaria para atraer la ayuda de un
Ángel
Cuando hablamos de Ángeles u oímos hablar de ellos, lo que nos viene a la
mente es un ser con grandes alas y de mucha hermosura, los cuales están para
hacer el bien. Tal vez para muchas personas, los Ángeles tienen una silueta
diferente, pero ésta siempre suele estar relacionada con algo que nos permite
tener ese contacto con Dios o con esa dimensión que generalmente no
comprendemos.
Algunos suponen que cuando una persona buena, o un niño muere, su alma deja
el cuerpo y ésta se eleva a las alturas transformándose en un Ángel, el cual
nos ayudará en la vida.
Sin embargo, la forma de ver a estos seres es variada así como variadas son
las religiones que existen; los escépticos catalogan a estos seres como
creaciones de la literatura o fabricados por las mismas religiones para tener
la esperanza de que existe algo superior. Más, sin embargo, puedo decir que
esto no es verdad porque durante mucho tiempo ha sido comprobada su existencia
con muchos y variados testimonios, desde la mas pequeña y humilde persona que
nos cuenta su experiencia angelical, hasta la persona mas culta y respetable
que ha tenido algún encuentro con estos hermosos seres de luz.
De lo único que podemos estar seguros es de que los Ángeles existen en un
plano superior y tienen una manera de vida diferente a la nuestra, por esto
cualquier comentario que se haga respecto a ellos no dejará de ser una
especulación basada en nuestras creencias religiosas.
Es difícil que el ser humano sienta la presencia de un Ángel en su vida o
incluso en sus sueños (donde en ocasiones se presentan para ayudarnos con
nuestros problemas) y esto sólo se debe a la educación pragmática y racional
que el hombre moderno tiene, ya que ésta cierra la vía de percepción por la
cual el Ángel se pone en contacto con nosotros.
Sabemos que los niños ven Ángeles con mayor frecuencia que un adulto, eso
no significa que sea por que son más incrédulos, sino que más bien es que no
han tenido una educación con ideas que el ser humano busca conforme va
creciendo.
Lo más hermoso que experimentamos en esa etapa infantil era cuando se
hablaba de Ángeles, los cuales (se nos decía) siempre estaban con nosotros para
cuidarnos, y eso ya era un gran motivo de alegría... pero dejamos de pensar en
ellos conforme crecimos y nos dedicamos a preocuparnos por lo intelectual y lo
material, y así quizás fue como nos apartamos de ellos.
Sin embargo, para recibir auxilio de los Ángeles no importa si creemos o no
del todo en ellos... siempre estarán dispuestos a ayudarnos de una marea
anónima.
"Los amigos son ángeles que nos llevan en sus brazos cuando nuestras
alas tienen problemas para recordar como volar".
“Busquemos a nuestros Ángeles... y demostrémosles un poco del amor que ellos
han demostrado para con nosotros”.
ALGUNOS ÁNGELES Y SU COMETIDO O AYUDA
Achaiah - - Ángel de la
paciencia
Af - - Ángel del Coraje
Aftiel - - Ángel del
crepúsculo
Aiqiel - - Ángel de los
cometas
Amaliel - -Ángel de la
debilidad
Amitiel - - Ángel de la
verdad
Ananchel--Ángel de la
gracia
Arael -- Ángel de las aves
Armisael --Ángel del
útero
Asiel -- Ángel de la salud
Azphlas - -Ángel de los
bosques
Barakiel - -Ángel de la
oportunidad
Baraqiel - -Ángel de la
iluminación
Chasam - -Ángel del aire
Duma - - Ángel de los
sueños
Eisheth - - Ángel de la
prostitución
Gabriel - -Ángel de la
vida
Gabriel - - Ángel de la
revelación
Gaghiel - -Ángel del pez
Harbonah --Ángel de la
aniquilación
Ireul - -Ángel del miedo
Isaac - - Ángel de la luz
Israfel --Ángel de la
música
Israfel - - Ángel de la
poesía
Kamael --Ángel de la
alegría
Kasdaye --Ángel del
Aborto
Kokabiel - Ángel de las
estrellas
Lailah - - Ángel de la
concepción
Leliel - - Ángel de la
noche
Lucifer -- Ángel caído de las
sombras
Macariel - -Ángel de la
lluvia
Mastema -- Ángel de la
Adversidad
Matarael --Ángel de la
lluvia
Michael - - Ángel del
insomnio
Michael - - Ángel de la
guerra
Michael - -Ángel de las
cosas correctas
Midael - - Ángel de los
guerreros
Mihr - - Ángel de la
amistad
Morael - - Ángel del temor
reverencial
Mumiel - -Ángel de la
salud
Nathanael --Ángel del
fuego
Orfiel - - Ángel del caos
Oriel - - Ángel del
destino
Orifiel - - Ángel del
Apocalipsis
Parasiel - -Ángel de los
tesoros
Phanuel - -Ángel de la
esperanza
Rahab - - Ángel del orgullo
Rahab - - Ángel del
océano
Ra'amiel --Ángel del
trueno
Ramiel - - Ángel del
trueno
Rampel - - Ángel de los
montes
Raphael - - Ángel del
progreso
Raphael - - Ángel de la
compasión
Raphael - - Ángel de la
cicatrización
Raphael - - Ángel del conocimiento
Rashiel - - Ángel de los
terremotos
Rismuch -- Ángel de la
Agricultura
Ruhiel - - Ángel del
viento
Sachiel -- Ángel del agua
Sadriel -- Ángel del orden
Sahaqiel --Ángel del
cielo
Salgiel - - Ángel de la
nieve
Samael -- Ángel de la
muerte
Samandiriel - - Ángel de
la fertilidad
Sandalphon - - Ángel de
la gloria
Saphlatus - - Ángel del
polvo
Satan - - Ángel del caos
Shateiel -- Ángel del
silencio
Sraosha - -Ángel de la
obediencia
Suriel - - Ángel de las
almas
Tabris - - Ángel de las
alternativas, del libre ser
Tahariel - -Ángel de la
pureza
Theliel - - Ángel del
amor
Tradkiel --Ángel de la
justicia
Uriel - - Ángel del
arrepentimiento
Yroul - - Ángel del miedo
Zaamiel --Ángel de los
remolinos
Zaapiel - -Ángel de los
huracanes
Zadkiel - -Ángel de la
memoria
Zeruel - - Ángel del poder
Zeruel - Ángel de la
fuerza
Si necesitas de la
ayuda de los arcángeles,
puedes escribirme aquí mismo en los comentarios de este artículo
y
te contaré como hacer para recibir su ayuda,
qué velas, días,
horas y colores debes utilizar y su oración.
O por privado para que te informe sobre las canalizaciones de los ángeles, curso, etc...
SUSANA SIETE LUNAS
Para contactar directamente
con Susana Siete Lunas
escríbele a
Las personas que se hallan en un estado proyectado
tienen realmente una parte de sí mismas "fuera de allí" en alguna parte, aunque ésta sea una proyección de la conciencia, no del alma. Algunas
personas psíquicamente sensibles han sido capaces de ver a esos viajeros
astrales, incluso algunos han regresado magullados. Tomo este último ejemplo
como prueba del poder de la mente para afectar en el nivel físico lo que se ve
en el mental. ¡Magia en acción!
El mejor momento para intentarlo y conseguirlo es
practicando intentar salir de nosotros mismos justo antes del momento de
quedarnos dormidos. 
